También la lluvia

Regisseurin: Icíar Bollaín

Produktion: Spanien/Mexiko/Frankreich, 2010

Dt. Titel: Und dann der Regen – También la lluvia

Genre: Drama, Historienfilm

Länge: 104 min.

También la lluvia“ erzählt die Geschichte eines spanischen Filmteams unter der Leitung von Sebastián (Gael García Bernal) und Costa (Luis Tosar), das in Bolivien einen Historienfilm über die Eroberung Amerikas durch Christoph Kolumbus drehen will. Eigentlich sollen die dortigen Ureinwohner den Film als Statisten unterstützen, doch dann rebellieren die Indios gegen den gängelnden Kapitalismus ihrer „Eroberer“.

Das opulente Historiendrama wurde auf etlichen (mittel-)amerikanischen und europäischen Filmfesten nominiert und ausgezeichnet. Beim großen spanischen Filmpreis, den Goyas, wurde der Film 13-mal nominiert und erhielt drei Auszeichnungen (Beste Produktionsleitung, Beste Filmmusik, Bester Nebendarsteller). Bei der Berlinale 2011 gewann er den Panorama-Publikumspreis in der Kategorie „Spielfilm“.

Der Film ist auf Amazon Video als DVD und als Stream (Sprache: Deutsch) verfügbar.

También la lluvia (reseña)

También la lluvia. Iciar Bollaín (2010)

Ambicioso es el proyecto de rodar una película sobre los españoles en el descubrimiento de América.
Diferentes tramas en una misma película: el rodaje, el conflicto del agua; una historia real de Cochabamba (Bolivia), y la evolución personal de Luis Tosar en su papel de Costa el productor del largometraje. Tres tramas que conviven en 104 amenos minutos.
El proyecto de Icíar Bollaín es ambicioso, tiene raíces afianzadas, ideas que piden ser plasmadas en la pantalla, palabras que tienen que ser dichas en alto, acciones que tienen que ser denunciadas, experiencias humanas que van desde la ignorancia hasta la compasión. Es un material diverso con fuerte significado, tiene carga documental y la oportunidad de mostrar una desnuda evolución en Luís Tosar marcada por el aprendizaje en el campo de batalla que es la vida. No se conseguirá el peso merecido de dichos principios. La película quedará como aguada, la escena final tiene cierto aire americano que la desmerece. La interpretación de los actores me satisface totalmente, con el „todopoderoso“ Karra Elejalde, alcohólico y deambulante, con el cambiante y a la vez humilde en su interpretación Luis Tosar, con el expresivo Gaél García, y hay que mencionar también al actor revelación Juan Carlos Aduviri, Daniel, el líder de los indígenas. No sé si es su físico, o su interpretación lo que me adentra en el pueblo indígena de antes y de ahora.
El conflicto del agua encierra otro más profundo en sí. La privatización del agua en la ciudad, presentada ésta con planos repletos de edificios, una multinacional controlará el agua en Cochabamba. Los indígenas se rebelan, luchan por sus derechos. Surgen manifestaciones en las calles, disputas, violencia. Las calles en guerra, los edificios en guerra, el polvo que todo lo rodea, todo en estado de guerra. Suena una guitarra, una cuerda tras otra, un tono tras otro. La lentitud de la violencia. El blanco y el indígena uno frente a otro. El blanco; ajeno, usurpador, conquistador y el indígena con ese mutismo basado en resentimiento , resentimiento, injusticia y vulnerabilidad. Solo queda ese mutismo y la obstinación del que no habla porque no le caben las palabras para expresar el dolor y la grieta abierta en el interior.
Injusticia desde su descubrimiento hasta la actualidad.
Los españoles, su iglesia, sus creencias, su avaricia. No sé si tendremos suficiente tiempo para enmendar lo ocurrido. El proyecto de Icíar Bollaín es un impulso al pensamiento crítico.
Pudo ser más, pero fue suficiente.
Recomendable.

Amores Perros (reseña)

Amores perros de Iñarritu (2000)

Fue la primera película del director mexicano. En ella se aprecian ya rasgos que aparecerán en otras posteriores. La confluencia de destinos es uno de ellos, esos puntos de intersección entre personas totalmente diferentes. Destinos metidos en su surco que fluyen con rapidez chocan en un punto, en general, con violencia y todos esos destinos dispares y diferentes saltan por los aires para hacerse un único latido.
Como marco tenemos la cultura mexicana, una delgada realidad, la necesidad de las clases más bajas, la supervivencia. La monotonía de la violencia será una constante en las tres historias de la película.
Primeros pasos de lo que será una larga carrera para Alejandro González Iñarritu al igual que para Gael García Bernal, ese joven actor que emana una naturalidad atrayente ante la cámara.
Me hieren ciertas escenas, las peleas de los perros, la sangre que lo inunda todo; inunda al perro vencedor, al perro muerto. Sangre que tiñe el escenario de rojo, salpica a los hombres que allí se encuentran. Los gritos de los hombres azuzando a matar… y esos perros fuera de si, degollándose bajo la mirada embriagada de lujuria y expectación de un público sórdido, real y sin salida.
No percibo esa ficción como ficción sino como realidad.
Mi cerebro me sugiere que eso está ocurriendo ahora.
Ahora.
Desasosiego es lo que me genera.
Un infinito reguero de premios azuza a Iñarritú a continuar con este tipo de ficciones.
Bienvenida la denuncia social.